Durante los últimos días ha habido una gran polémica respecto a la restricción del tráfico por las calles del centro de Madrid debido a los altos índices de contaminación. Sin embargo, la capital no es la única ciudad española en sobrepasar los límites que establece la normativa legal. Barcelona, Valencia, Murcia, Córdoba y Granada también están en riesgo por la mala calidad de su aire.
Mucho se habla y mucho se debate acerca de esta importante cuestión, pero ¿conoces verdaderamente los riesgos concretos que puede suponer para tu salud una exposición regular al aire contaminado?
El primer efecto que debemos conocer es que las defensas inmunitarias de nuestro cuerpo se verán afectadas. Seremos mucho más vulnerables a padecer cáncer, infertilidad, ciertas patologías neurológicas, procesos alérgicos, enfermedades autoinmunes, depresión y ansiedad.
«Una buena salud depende en gran parte de un sistema inmune fuerte, que es quien tiene la capacidad para proteger al organismo frente a las enfermedades. Entre los factores que pueden alterar las defensas inmunitarias está la exposición mantenida a un aire contaminado, que altera la capacidad reactiva celular y humoral del organismo”. Esta afirmación se traduce hasta en 15.000 muertes prematuras cada año en nuestro país, sobre todo en niños, adolescentes y adultos mayores de 60 o 70 años, los principales grupos de riesgo.
En el caso de niños y adolescentes con un sistema inmunológico en pleno desarrollo que viven en ambientes contaminados, aumentan los casos de enfermedades respiratorias como el asma y las alergias respiratorias. Las personas mayores, que por lo general cuentan con un sistema de defensa debilitado o padecen enfermedades asociadas sufren más enfermedades cardíacas, arteriosclerosis y EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).
Atendiendo a los casos de mujeres embarazadas, la consecuencia de la exposición constante al aire contaminado es la gran probabilidad de tener bebés con un peso bajo al nacer. Estos niños tienen una tasa alta de mortalidad perinatal y una mayor posibilidad de desarrollar enfermedades a lo largo de su vida.
También se han visto resultados que señalan un elevado riesgo en cesáreas y de partos prematuros en mujeres embarazadas que viven en zonas de alta contaminación del aire.
Estos datos nos indican que los problemas de salud que podemos padecer debido a una exposición continuada al aire contaminado es real, es peligrosa tanto a corto como medio y largo plazo y que debemos concienciarnos lo antes posible para entre todos establecer unas medidas que nos ayuden a ponerle freno a esta situación.