Una gran desconocida que va ampliando terreno en la actualidad es la energía geotérmica; fuente renovable, que aprovechando el calor que hay en el interior terrestre, es capaz de climatizar y calentar agua sanitaria de manera ecológica. Reduce de forma muy considerable el consumo en calefacción, agua caliente sanitaria y refrigeración debido a su elevada productividad. Lo mejor es que se puede utilizar tanto en viviendas como en grandes superficies; desde fabricas, hospitales… Eso sí, tras un estudio previo de la superficie debido a las perforaciones o excavaciones que hay que realizar para colocar las sondas de captación.
Se la considera una energía limpia, renovable y eficiente. El primer país de la Unión Europea que ha apostado por esta energía ha sido Suecia, además de otros países a nivel intercontinental que ya se están aprovechando de los benéficos que está ofrece, como son Estados Unidos, Finlandia, Japón, Francia o Alemania.
Las características de las diferentes fuentes son fundamentales y de estas dependerá el tipo de empleo que se puede aplicar de la geotermia. Los recursos de alta temperatura que superan los 100-150ºC, se dedican la producción de electricidad. En caso de que las temperaturas no asciendan de los 100ºC, la energía se aplica en usos térmicos. Las temperaturas que son menores a los 100ºC sirven para calefacción y refrigeración. Son los recursos más bajos (por debajo de los 25º) los que se utilizan para la climatización y obtención de agua caliente. El instrumento principal necesario para aprovechar esta energía son las Bombas de Calor Geotérmicas que además de abastecernos con agua caliente sanitaria, nos pueden calentar en invierno y refrigeran en verano.
En la actualidad, el procedimiento de captación más común son los pozos verticales. Aunque se trata del sistema más caro, también es el más efectivo, al requerir menor espacio y conseguir el mayor rendimiento. La razón es que las sondas de captación penetran a mayor profundidad y la temperatura que alcanzan es más estable todo el año. En España, con una o dos sondas sería posible calentar una vivienda unifamiliar, sin necesidad de otros sistemas de calefacción.
Además de los pozos verticales, nos podemos aprovechar de la geotermia con sistemas horizontales y captaciones freáticas. Los sistemas horizontales son más económicos pero al mismo tiempo, el rendimiento es menor y son más vulnerables a los cambios de temperatura externos. Por otro lado, las captaciones freáticas son circuitos abiertos, en contraposición con los sistemas anteriores que son circuitos cerrados. Captan el agua en un primer pozo y después la liberan en un segundo pozo. Este procedimiento solo se puede realizar en zonas concretas donde existan acuíferos en constante reposición.
En resumen, se trata de una energía que aún no ha llegado a calar de forma masiva debido al desconocimiento, pero que puede convertirse en una energía muy demandada en un futuro próximo debido a sus grandes ventajas.