Siempre hay una primera vez para todo en la vida. La primera vez que montas en bicicleta, la primera vez que vas a la playa, el primer amor… lo mismo pasa con el aire acondicionado. Hace más de 500 años, fueron los persas los primeros que ya intentaron aclimatar sus estancias para mejorar la calidad de vida. Te contamos las primeras veces más importantes del aire acondicionado y la climatización.
Empezamos por el comienzo. El primer aire acondicionado moderno se diseñó en julio de 1902 de la mano de Willis Haviland Carrier. Su objetivo era controlar las variaciones de temperatura y la humedad que dificultaban la impresión de papel de la imprenta en la que trabajaba. De esta manera, dio lugar al primer equipo de climatización de la historia.
De esta manera, los primeros clientes en utilizar estos sistemas de aire acondicionado, fueros las industrias textiles del sur de Estados Unidos. La carencia de humedad daba lugar a un exceso de electricidad estática creando problemas en la fabricación del material haciendo que las fibras de algodón derivaran en pelusa. Con el aire acondicionado, la humedad se equilibró y ésta desapareció, eliminando el problema. Así, poco a poco, otro tipo de industrias nacionales e internacionales se fueron sumando a probar este invento como laboratorios farmacéuticos, tabaco o panaderías. Mejoraron sus procesos de elaboración de productos.
Los cines también marcaron un momento de inflexión en la historia de los aires acondicionados, siendo el primer lugar público en el que se instaló. Esto también influyó en la temporada de proyección de los de películas por parte de la cinematográfica, y centraron en el verano sus estrenos más importantes ya que, con la presencia del aire acondicionado, aseguraban una mayor audiencia.
En 1939 se introdujo por primera vez el aire acondicionado en los coches. Fue en los automóviles Packard. Sin embargo, su alto costo y el gran espacio que ocupaba, le restaron popularidad.
Y por último, 20 años después, apareció el primer equipo de aire acondicionado de ventana orientado para el uso doméstico. Compacto, ligero y fácil de instalar. Destinado a mejorar el bienestar en el hogar.