Es invierno y es innegable que durante los meses de más frío necesitamos encender la calefacción. Pero, ¿cuál es la temperatura ideal para estar cómodos y que no se dispare el gasto energético?, ¿es bueno mantener la calefacción encendida para que la casa no pierda temperatura?, ¿de dónde podemos recortar el gasto en la factura de cada mes?
Es cierto que hay ciertas costumbres que nos ayudan, pero hay muchas otras creencias que son falsas y, lejos de ayudar, provocan que estemos derrochando energía.
- Si la factura de calefacción es cara, es por la tarifa elegida
Es posible que la tarifa que hemos escogido no sea la más adecuada al tipo de gasto energético que se realiza en nuestra casa. Seguramente haya descuentos u otro tipo de tarifas que nos favorezcan. Sin embargo, este no suele ser el principal motivo de un exceso de gasto, hay factores que afectan en mayor medida: una caldera ineficiente, un mal uso del sistema de calefacción, un mal aislamiento, etc.
Por ejemplo, podemos ahorrar entre un 8% y un 13% si empleamos válvulas termostáticas o termostatos programables en los radiadores.
- Es mejor subir al máximo la calefacción
No es cierto. Subir la calefacción de forma sistemática por encima de los 21 grados es un auténtico derroche, ya que por encima de esa temperatura cada grado extra supone un aumento del gasto de un 7% más de energía.
- Por la noche se debe mantener la calefacción encendida
Esto no siempre es así, por lo general de hecho es energéticamente más eficiente apagar la calefacción por la noche y encenderla por la mañana al despertarnos en vez de que esté funcionando durante toda la noche.
En el caso de viviendas que no cuenten con un buen aislamiento, puede ser necesario mantener la calefacción encendida a 15-17 grados para que no baje más la temperatura y vaya a costar más volver a caldearla posteriormente.
- Todas las habitaciones deben estar a la misma temperatura
Esto es falso, y además esta costumbre supone un auténtico derroche energético. Si hay habitaciones que no se utilicen habitualmente lo ideal es cerrar los radiadores y mantener las puertas cerradas.
- Las ventanas apenas influyen en el uso de la calefacción
No es cierto, además puede haber hasta un 30% de las necesidades de calefacción del hogar que se deban a pérdidas de calor a través de las ventanas. Es por ello que es conveniente invertir en la renovación de las ventanas y en que cuenten con un buen aislamiento.
Sí hay algo que es cierto, y es que realmente cada pequeño gesto cuenta para que se produzca el mínimo derroche y poder ahorrar energía. Para ello, lo ideal es contar con la información correcta.