Estamos en pleno verano y con mucho calor, por lo que tener el aire acondicionado en el mejor estado para refrescarnos en casa es necesario. Pero, ¿qué pasa si llegamos y el aire acondicionado no enfría? Una de las causas más comunes es que tenga falta de gas refrigerante a causa de una fuga en el circuito o por un error de instalación. Incluso la falta de gas en el aire acondicionado puede deberse a que un poro se haya abierto en algún lugar de la tubería o en la soldadura.
El condensador de arranque también puede ser el que produzca que el aire acondicionado no enfríe. En este caso puede ser por la parte del ventilador o del compresor y la mejor forma de comprobar cuál es el que no funciona es tocando las tuberías, pues si estas están a temperatura ambiente quiere decir que es la parte del compresor la que no funciona bien.
Si los filtros del aire acondicionado están sucios, es posible que produzcan una bajada de presión del gas y una incorrecta circulación del aire. En este caso podremos ver que el equipo puede empezar a congelarse y no enfriar la estancia. Esto provocará también un alto consumo eléctrico que puede llevar a que el presostato, el sistema de seguridad del aire acondicionado, salte.
Incluso las altas temperaturas pueden ser las causantes de que nuestro aire acondicionado no enfríe, pues funcionan a través del sub-enfriamiento y las altas temperaturas pueden ser interpretadas por el aparato como si fuera la misma temperatura la generada que la del ambiente, dándose la situación de que la máquina se bloquee y se pare. Terrazas y azoteas son las que más sufren estos problemas, donde el calor es excesivo o porque la máquina se encuentre en un lugar donde la ventilación no es la correcta.
A pesar de estar seguro de por qué el aire acondicionado no enfría, recuerda que siempre es mejor tener una segunda opinión de un profesional para solucionar el problema de la mejor forma.