Para cualquier tipo de negocio especializado en comida y hostelería, es necesario elegir una cámara frigorífica que cubra todas las necesidades de refrigeración industrial específicas para mantener en condiciones óptimas cada uno de los alimentos. Pero para comprar una camara frigorifica industrial adecuada para el negocio, es imprescindible evaluar una serie de factores como la capacidad de almacenamiento que requieres o la frecuencia de suministro.
Una cámara de frío tipo walk in es perfecta para alimentos refrigerados, que van a ser tanto expuestos como servidos en grandes cantidades. Son de diseño atractivo, pues cuentan con puertas de vidrio y muy buena iluminación, de modo que los alimentos se ven mucho más atractivos y aumenta la compra por impulso. En caso contrario, si tienes limitación de espacio y tienes entregas continuas, elige una mini cámara frigorífica. Estas se montan desde el interior y permiten aprovechar hasta el último lugar del espacio a través de un montaje sencillo y rápido y con el mejor acabado. Pero, si aún esta cámara es grande para lo que necesitas realmente, la utilización de armarios frigoríficos puede ser una de las mejores opciones.
Si lo que realmente buscas es llamar la atención del consumidor hacia los productos en venta, elige las vitrinas refrigeradas. Estas dejarán a la vista el producto de manera atractiva, de modo que el comprador podrá ver con todo detalle el producto.
En cualquier caso, siempre puedes combinar diferentes tipos de cámaras frigoríficas para conseguir la mejor conservación de los productos y abastecer todas las necesidades, tanto de conservación como de atractivo al público, así como combinar vitrinas refrigeradas para exponer lo productos más atractivos con una cámara de frío tipo walk in para guardar productos en grandes cantidades.
